lunes, 17 de enero de 2011

¿Existen problemas de comportamiento en el gato?

Si, son frecuentes.
Los propietarios de gatos pocas veces consultan con un médico veterinario especializado en etología clínica  porque suponen que el comportamiento huraño o agresivo que presenta es consecuencia de su temperamento, por lo tanto es normal y no se soluciona.
Quisiera poder modificar esta idea.
La conducta del gato depende de la genética y del ambiente que lo rodea desde su estancia en el vientre materno. O sea, está influenciado por el comportamiento de la madre, las condiciones en que se desarrolló su gestación, de cómo, dónde y por quien fue criado y educado, y las características de vida actuales.
Por lo tanto, respecto del comportamiento, son muchas las variables que deben tenerse en cuenta.
El gato es un animal territorial y el simple cambio del mobiliario, o la presencia de nuevos habitantes en el hogar pueden alterar su conducta.
Suele presentar distintos problemas de comportamiento, que pueden ser conductas normales para la especie pero indeseables para la convivencia con el hombre, conductas alteradas o patológicas.
Para diferenciarlas es necesario realizar un examen clínico etológico. Por medio de este se arriba al diagnóstico y se decide si es necesario implementar un tratamiento comportamental, que puede, en ocasiones, requerir la utilización de medicación como complemento del mismo.

¿Qué debemos considerar?
 Si el gato presenta, entre otras, algunas de las siguientes conductas: es muy asustadizo o permanece escondido, solo se alimenta durante la noche, muerde o araña al ser acariciado o en otras situaciones, defeca u orina fuera de su bandeja sanitaria o en diferentes lugares de la casa, araña diferentes muebles, persigue en forma agresiva a otro gato del hogar o está pendiente de sus movimientos para abalanzarse sobre él, se arranca el pelo o se ocasiona lesiones por el lamido constante de una zona del cuerpo, solicita constantemente alimento o vomita porque ingiere más de lo necesario, maúlla sin descanso, succiona o come ropa, bolsas de nylon, etc., no se limpia, ataca a las visitas o las piernas cuando alguien se desplaza por la casa... es muy probable que no esté bien y necesite ayuda profesional. Es importante recordar que cuanto antes se actúe, mejor y más rápida será la respuesta del tratamiento.

¿Pueden prevenirse?
Sí.
Desde pequeño debe habituarse a diferentes estímulos cotidianos y a estar en contacto con las especies animales con quienes tendrá que convivir y personas de diferente sexo y edad.
Debe brindársele un ambiente limpio y amigable, con diferentes alturas y lugar para arañar, juguetes y juego adecuado, ser coherentes en el mensaje que se le brinda diariamente, respetarlo cuando se retira para no ser molestado y evitar siempre los malos tratos.

Algunos de mis pacientes:

En unos segundos estaré listo...