Una causa de consulta frecuente en Etología Clínica (Medicina comportamental) es que el perro de la familia muerda a uno de sus integrantes. Además, diarieros, carteros, personal del servicio doméstico, plomeros, entre otros, pueden ser también perseguidos, acorralados o lesionados por él.
Los animales con agresividad son de peso y tamaño diferente, mestizos o de diferentes razas, desde el Chihuahua hasta el Gran Danés, por nombrar extremos fácilmente identificables, y sus víctimas generalmente son niños, mujeres o ancianos. Obviamente, la seriedad de las lesiones es proporcional a las características propias del perro (tamaño, potencia de mordida), y de la persona (edad, contextura física) involucrados en el conflicto; ahí yace el verdadero peligro.