En un grupo de cachorros es difícil distinguir machos y hembras porque todos se comportan de manera semejante. Con el correr del tiempo, poco a poco, empiezan a diferenciarse. Es frecuente preguntarse qué sexo será el más adecuado para la familia ya que esto influirá mucho en algunos comportamientos del perro.
Las conductas propias de macho y hembra, llamados comportamientos sexualmente dimórficos, se manifiestan en la madurez sexual.